Todas las personas, en algún momento de la vida, nos preguntamos por el sentido de ésta, por el “por qué” y sobre todo el “para qué” de las cosas que nos suceden.
Queremos saber acerca del origen y el fin de la existencia, de forma personal y sintiéndonos parte de la humanidad, y también por nuestro mundo, en tanto lugar en el que vivimos y como herencia que dejaremos a nuestros hijos e hijas.
Nos importa conocer por qué existe el mal, el dolor, el sufrimiento…, cómo vivir con él y qué está en nuestra mano ofrecer.
Nos interpelan las situaciones de guerra, pobreza, hambre, discriminación, frente a la realidad de aquellos que vivimos en paz, con nuestras necesidades satisfechas, con unos derechos adquiridos,…
Preguntamos buscando aquello que nos lleve por un camino de plenitud, de felicidad, que nos haga mejores personas y que mejore nuestro entorno.
La enseñanza de Religión Católica tiene como objetivo suscitar en los alumnos y alumnas estas preguntas y muchas más, ofreciendo como respuesta la propuesta de la Buena Noticia de Jesús de Nazaret. Que no es otra que la de seguir el mandamiento que Él nos enseñó: el del amor y el servicio. Una propuesta que podemos elegir libre y conscientemente, reconociendo nuestra verdad honda de ser criaturas amadas por Dios.